El estatalismo es una corriente política que propone la intervención y el control del Estado en distintos ámbitos de la sociedad. En este sistema, el Estado es el principal garante de la protección de los derechos y necesidades de los ciudadanos.
La idea central del estatalismo se basa en la creencia de que el Estado debe generar oportunidades equitativas para todos los ciudadanos, en lugar de dejar la responsabilidad en manos de la iniciativa privada. De esta manera, se busca implementar medidas que brinden igualdad y justicia social.
Uno de los fundamentos del estatalismo es que el Estado debe jugar un papel central en la economía, regulando y controlando los procesos productivos y la distribución de bienes y servicios. Además, se busca que el Estado tenga una mayor participación en la educación, la salud y la cultura, con el fin de garantizar el acceso universal a estos servicios básicos.
En resumen, el estatalismo es una corriente política que defiende la importancia del Estado en la solución de los problemas sociales y económicos. A través de su intervención en distintos ámbitos de la sociedad, se busca brindar equidad, justicia y protección a la ciudadanía.