En el capítulo 5 del libro de San Juan, se relata un evento muy significativo en la vida de Jesús. Este capítulo comienza con la descripción de un estanque de Betesda, donde se encontraban numerosas personas enfermas esperando la oportunidad de ser sanadas.
En este contexto, Jesús se acerca a un hombre que llevaba 38 años enfermo y le pregunta si quiere ser sanado. El hombre le responde que no tiene a nadie que lo ayude a entrar en el estanque cuando el agua se agita, por lo que siempre es superado por otras personas.
Ante esto, Jesús le indica al hombre que se levante, tome su camilla y camine. El hombre obedece y de inmediato queda sanado. Sin embargo, este milagro ocurre en día de reposo, lo que despierta la ira de los líderes judíos que consideran esto una violación del sábado.
Posteriormente, Jesús se encuentra con el hombre sanado en el templo y le advierte que no peque más, para que no le suceda algo peor. Esto indica que no solo Jesús deseaba sanar físicamente al hombre, sino también liberarlo de cualquier pecado que pudiera estar en su vida.
La respuesta de los líderes judíos ante este milagro fue aún más hostil. Comenzaron a perseguir a Jesús y a planear su muerte, debido a que él no solo violaba el sábado, sino que también se llamaba a sí mismo Hijo de Dios, haciéndose igual a Dios.
En resumen, el capítulo 5 de San Juan narra el milagro de la sanación de un hombre enfermo en el estanque de Betesda, desató la ira de los líderes judíos y llevó a Jesús a ser perseguido. Además de mostrar el poder y la compasión de Jesús, también resalta la importancia de obedecer a Dios y evitar el pecado.
El capítulo 5 de San Juan nos presenta el relato de Jesús curando a un hombre enfermo en la piscina de Betesda. En este pasaje, Jesús muestra su poder y autoridad al sanar a un hombre que llevaba 38 años en condiciones muy difíciles.
En primer lugar, este capítulo nos enseña la compasión y el amor de Jesús hacia los que sufren. El hombre enfermo había estado esperando por mucho tiempo una oportunidad para ser sanado, y Jesús se acerca a él y le pregunta si quiere ser curado. Es importante destacar que Jesús no solo tiene el poder de sanar, sino que también se preocupa por el bienestar de cada persona.
En segundo lugar, este pasaje nos enseña la importancia de la fe y la confianza en Dios. Cuando Jesús le dice al hombre que se levante y camine, éste obedece y experimenta la sanación. La fe es fundamental para recibir la obra de Dios en nuestras vidas, y este capítulo nos anima a confiar en Él y en su poder para transformar nuestras situaciones difíciles.
Además, este pasaje también nos muestra la oposición y el rechazo que Jesús enfrentó. Después de la curación, los líderes religiosos confrontan a Jesús acusándolo de violar la ley al sanar en el día de reposo. Es interesante observar cómo algunas personas pueden rechazar el poder y la gracia de Jesús debido a su propia rigidez y apego a las normas religiosas.
En resumen, el quinto capítulo de San Juan nos enseña sobre la compasión y el amor de Jesús, la importancia de la fe y la confianza en Dios, y la oposición que Jesús enfrentó. Este pasaje nos invita a confiar en Jesús y a buscar su sanación en nuestras vidas.
En el capítulo 5 del evangelio de Juan, encontramos un relato sobre Jesús sanando a un paralítico en la piscina de Betesda. Este pasaje nos enseña varias lecciones importantes.
En primer lugar, vemos que Jesús tenía compasión por los enfermos y los necesitados. Él se acercó al hombre que había estado paralizado durante 38 años y le preguntó si quería ser sanado. Jesús no sólo se preocupaba por su condición física, sino también por su bienestar espiritual.
En segundo lugar, esta historia nos enseña sobre la importancia de la fe y la obediencia. Jesús le dijo al hombre que se levantara, tomara su camilla y caminara. El hombre obedientemente hizo lo que Jesús le dijo y fue sanado al instante. Esto muestra que nuestra fe en Jesús y nuestra obediencia a sus palabras pueden resultar en milagros y transformación en nuestras vidas.
En tercer lugar, vemos la reacción de los líderes religiosos judíos ante este milagro. En lugar de regocijarse por el milagro y reconocer la autoridad de Jesús, se enojaron y comenzaron a perseguirlo porque había sanado en el día de reposo. Esto nos enseña la importancia de no dejar que la religiosidad y la tradición obstaculicen nuestra relación con Dios y nuestro reconocimiento de su obra en nuestras vidas.
En resumen, el pasaje de Juan 5:1-16 nos enseña sobre la compasión de Jesús hacia los necesitados, la importancia de la fe y la obediencia, y la necesidad de no dejar que la religiosidad obstaculice nuestra relación con Dios.
El Evangelio de Juan capítulo 5 versículo 20 nos presenta las palabras de Jesús, quien dice: "Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que él hace; y mayores obras que estas le mostrará, de manera que vosotros os maravilléis."
En este versículo, Jesús se refiere a sí mismo como el Hijo y al Padre como aquel que le ama y le muestra todas las cosas que Él hace. Es un recordatorio del amor y la comunión que existe entre el Padre y el Hijo.
Jesús también anuncia que el Padre le mostrará "mayores obras" que las que Él ha realizado hasta ahora. Esto implica que vendrán milagros y acciones aún más asombrosas en el futuro, para que todos aquellos que lo observen se maravillen ante su poder.
Esta afirmación de Jesús nos recuerda que Él es el enviado de Dios y que su poder y autoridad provienen del Padre. Nos enseña que no hay límites para lo que Dios puede hacer a través de Él y nos invita a confiar plenamente en su plan y propósito.
En resumen, Juan capítulo 5 versículo 20 nos muestra la relación íntima entre el Padre y el Hijo, así como la promesa de que Jesús realizará obras aún más grandes en el futuro. Es un recordatorio de la confianza que debemos tener en Dios y en su poder para hacer cosas maravillosas en nuestras vidas.